En el Día de los Veteranos en Estados Unidos, diversas organizaciones de exmilitares pacifistas organizaron manifestaciones bajo el lema «No a las guerras en nuestras ciudades». A partir de estas protestas, los grupos de excombatientes expresaron su descontento a los despliegues militares internos y a la política de seguridad del presidente Donald Trump.
Por otra parte, los organizadores de las actividades denunciaron que la administración del mandatario estadounidense “ataca sin piedad a las comunidades estadounidenses” mientras recorta programas sociales y aumenta las operaciones militares tanto en territorio nacional como en el extranjero.
En consecuencia, “Estamos diciendo no por nuestras familias, por nuestras comunidades y por nosotros… no a los recortes, no a tropas desplegadas en nuestras calles, y no a multimillonarios desangrando a nuestra nación”, expresaron los protestantes en un comunicado conjunto.
Veteranos protestan en más de 75 ciudades
Los exmilitares realizaron las movilizaciones de manera simultánea en más de 75 ciudades de EE.UU., incluyendo Nueva York, Washington, Los Ángeles, Portland, Chicago, Memphis y Boston.
Específicamente, en la capital estadounidense, cientos de veteranos vistieron uniformes e insignias militares para protestar frente al monumento a los veteranos de guerra con el fin de exigir el fin de los recortes a los programas de asistencia y condenar la militarización de las ciudades.
Asimismo, durante el mitin, varios veteranos de guerra compartieron su preocupación por el uso de las fuerzas armadas contra civiles y por el apoyo militar de Washington a Israel, que muchos manifestantes calificaron de “complicidad con un genocidio contra el pueblo palestino”.
Opiniones del sistema militar
Harrison Mann, exmayor del Ejército de EE. UU., renució a su puesto a su puesto en la Agencia de Inteligencia de Defensa (DIA) en protesta por el apoyo de su oficina a Israel durante su campaña en Gaza. Mann denunció que militares estadounidenses reciben órdenes que podrían constituir crímenes de guerra.
Por su parte, Randy Kindle, exintegrante de la Fuerza Aérea, sostuvo que “los veteranos no necesitan un agradecimiento por su servicio, necesitan un gobierno que amerite ese servicio”.
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