Paloma Nicole Arellano, de 14 años, vivía en Durango y perdió la vida el pasado 20 de septiembre de 2025 tras someterse a procedimientos estéticos en la Clínica Santa María. El caso ha causado conmoción por la edad de la menor y las condiciones en las que se realizaron las intervenciones quirúrgicas.
De acuerdo con reportes oficiales, a Paloma Nicole se le practicaron implantes mamarios, liposucción y lipotransferencia de glúteos alrededor del 12 de septiembre de el año en curso. La operación tuvo lugar en la Clínica Santa María, un centro privado que contaba con licencia sanitaria federal, aunque no existía en Durango una regulación clara sobre la edad mínima para someterse a este tipo de procedimientos.
Autorización y consentimiento
El consentimiento informado fue firmado únicamente por la madre de la adolescente. El padre biológico denunció que nunca fue notificado sobre las intervenciones y que incluso se le hizo creer que su hija estaba enferma de COVID-19. Posteriormente, descubrió en el funeral que la menor presentaba implantes y prendas postquirúrgicas, lo que dio paso a una necropsia y a la apertura de investigaciones.
El dictamen médico preliminar señaló edema cerebral, encefalopatía hipóxica y bradicardia como causas del deceso. Sin embargo, las autoridades aún realizan estudios periciales e histopatológicos para determinar si la cirugía fue el origen directo de las complicaciones.
Investigaciones en curso

La Fiscalía de Durango confirmó la detención de la madre y el padrastro de la menor, Paloma Nicole. Ambos enfrentan acusaciones por omisión de cuidados, falsificación de documentos y posible mala praxis médica.
